En el libro de Mateo, capítulo 2, versículo 1-23, se describe el nacimiento de Jesús y los eventos que siguen. Este pasaje es fundamental en la narrativa del Nuevo Testamento, ya que establece el contexto geográfico y político en el que nace Jesucristo, así como los elementos que lo rodean, incluyendo la visitación de los magos y la huida a Egipto.
El pasaje comienza con la descripción de la visita de los magos, también conocidos como los Reyes Magos, que seguían una estrella que habían visto en el oriente. Esta estrella los condujo a Belén, donde encontraron al niño Jesús. Los magos, que eran sabios o astrólogos de una región desconocida, trajeron consigo regalos de oro, incienso y mirra, que tenían significados profundos en la cultura judía y en la narrativa cristiana.
La reacción del rey Herodes ante la noticia del nacimiento de un nuevo rey es crucial en este capítulo. Herodes, temiendo que el niño viniera a destronarlo, ordenó la matanza de todos los niños menores de dos años en Belén y sus alrededores, en un intento por eliminar a Jesús. Sin embargo, José, el padre adoptivo de Jesús, fue advertido por un ángel en un sueño de la intención de Herodes, lo que llevó a la familia a huir a Egipto hasta que muriera Herodes.
El capítulo también hace referencia a varias profecías del Antiguo Testamento, destacando cómo los eventos en la vida de Jesús cumplieron con las expectativas mesiánicas de los judíos. Por ejemplo, la huida a Egipto y el regreso a la tierra de Israel están relacionados con la profecía de Oseas, “De Egipto llamé a mi Hijo”.
La narrativa de Mateo 2 se centra en la tema de la búsqueda y la identificación del Mesías, así como en la oposición que Jesús enfrentaría desde su nacimiento. Los eventos descritos en este capítulo sentaron las bases para la vida y el ministerio de Jesús, que se desarrollarían en los capítulos siguientes del Evangelio de Mateo.
En conclusión, Mateo 2 ofrece una visión detallada de los eventos que rodearon el nacimiento de Jesucristo, combinando elementos históricos, culturales y teológicos que resaltan la importancia de Jesús en la narrativa cristiana. Los elementos de búsqueda, persecución y cumplimiento de las profecías establecen un marco poderoso para la comprensión del significado de la vida de Jesús.
Aquí está una versión completa de Mateo 2 de la Biblia Católica de 1923:
- Cuando Jesús nació en Belén de Judea, en días del rey Herodes, llegaron del oriente unos magos a Jerusalén,
- preguntando: ¿Dónde está el rey de los judíos que ha nacido? Porque hemos visto su estrella en el oriente y venimos a adorarle.
- Oyendo esto, el rey Herodes se turbó, y toda Jerusalén con él.
- Y convocando a todos los príncipes de los sacerdotes y a los escribas del pueblo, les preguntó: ¿Dónde ha de nacer el Cristo?
- Ellos le dijeron: En Belén de Judea, porque así está escrito por el profeta:
- “Y tú, Belén, tierra de Judá, no eres la menor entre las principales ciudades de Judá, porque de ti saldrá un guiador que pastoreará a mi pueblo Israel”.
- Entonces Herodes, llamando en secreto a los magos, averiguó de ellos el tiempo en que había aparecido la estrella,
- y enviólos a Belén, diciendo: Id, y preguntad diligentemente por el niño; y cuando lo halléis, avisadme, para que yo también vaya a adorarle.
- Ellos, oyendo al rey, se fueron; y he aquí, la estrella que habían visto en el oriente iba delante de ellos, hasta que vino y se detuvo sobre el lugar donde estaba el niño.
- Viendo la estrella, se regocijaron con grandísimo gozo;
- y entrando en la casa, hallaron al niño con María su madre, y postrándose lo adoraron; y abriendo sus tesoros, le ofrecieron dones: oro, incienso y mirra.
- Y habiendo recibido aviso en sueños que no volviesen a Herodes, se fueron por otro camino a su tierra.
…
- Y vino a habitar en una ciudad que se llama Nazaret, para que se cumpliese lo que fue dicho por los profetas: “Será llamado nazareno”.
Este pasaje es una parte integral de la narrativa del nacimiento de Jesucristo y su significado en la fe cristiana. La forma en que Mateo entreteje los eventos históricos con las profecías del Antiguo Testamento subraya la importancia teológica de Jesús como el Mesías esperado.
